Sonríe. La alegría resplandece en sus ojos. Su rostro transmite el ingenio propio de esta tierra solar. Su nombre es José Luis Córdova Rumiche, Luscor, el padre de piajeno, el creador de la líneas que forman el borrico mas famoso de la ciudad, el culpable de nuestra sonrisa al ver el diario en la mañana.
Y bien, ¿Qué quieres saber? Me interroga, comenta algunas anécdotas del día, como hombre común: padre, esposo, artista, pero, sobre todo, un buen amigo con quien tomarse una taza de café o una Coca Cola. ¿Cómo nace piajeno? Me aventuro a preguntar, siento que la nostalgia lo invade, poco a poco hilvana los recuerdos. En 1991, Don Víctor Helguero decide crear un espacio de humor local en El Tiempo, una caricatura de crítica mordaz, así, de los tres bocetos: la mota de algodón, la lagartija y el piajeno, queda este último. Su hijo había nacido.
Luscor nació con el arte en las venas, desde pequeño ganaba los concursos de dibujo y pintura. A los 17 años, al terminar la secundaria empieza a realizar sus primeras caricaturas, sus trazos artísticos llegaron a las redacciones de los diarios La Industria y Correo. Su lápiz llego a Lima, donde publica cuentos literarios y comics en las revistas Especto y Fantazine; emprende viajes para realizar exposiciones. “Siempre quise ser dibujante, no medico ni otra profesión”, confiesa
Piajeno es el hijo mimado. “Piajeno no depende de mi, si no, yo dependo de Piajeno”, expresa, y es que el burrito le permite mostrar su creatividad, usado en diferentes campañas. El burro es un personaje cotidiano, y en las hojas del diario se observa al animal símbolo de la ignorancia convertido en un personaje que piensa.
Su hijo es más famoso que él, eso lo convierte en un padre orgulloso, sin embargo, se identifica con el “Churrito”, ese niño que a veces acompaña al buen piajeno. El es su alter ego, tiene su estilo de hablar, es el chispazo propio del poblador del Bajo Piura, “nací en la ciudad, pero mis padres eran campesinos”. El Piajeno es archiconocido, “muchos artistas luchan por crear un personaje que los identifique. Yo lo he logrado”.
El piajeno es opinión. Luscor expresa que su creación le ha ayudado a perder la timidez, dar cursos, dictar talleres. “Es importante ejercer la critica, si no existiera la critica, los sinvergüenzas tendrían luz verde para hacer lo que quieran”.
¿Alguna etapa con dificultad para la crítica de Piajeno?
“La etapa mas espinuda fue la época de Fujimori, en la que había que tomar con pinzas la critica, hacer humoradas sutiles”. Para Luscor fue una etapa de clarividencia, “era como saber el resultado de un partido de fútbol”, la disolución del parlamento, la reelección, la re reelección, la caída, habían sido avizorados.
¿Reflexiones Finales?
El piajeno ha ayudado a reflexionar a los piuranos, a cambiar el derrotismo, el humor ayuda a cambiar ese sentimiento de frustración. Todos se dan por aludidos en sus viñetas. Luscor comenta que quiere ver a su piajeno convertido en dibujo animado, y antes de terminar la conversa me dice que escribe poesía también. La noche ha invadido el centro de la ciudad, ¿Qué habrá para mañana pienso?, Luscor ha vuelto a sonreír.
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